LA MERCANTILIZACIÓN DE LA POLITICA
La mercantilización creciente de la política mundial es, sin duda alguna, el signo más peligroso, y representa la amenaza más devastadora a la que se enfrentará la regeneración politica en este pais en caso de alcanzar un éxito significativo en los próximos comicios.
Todo sistema democrático, incluso cuando lucha por ser un sistema democrático lo más real, directo e independiente posible, si quiere formar parte de las regiones del mundo material desarrollado, debe renunciar a cierta porción de su soberanía en materia de política económica, por exigencia de ese continuo e imparable proceso de integración de mercados de la economía mundial, conocido con el nombre de globalización o mundialización.
Esta llamada exigencia del mercado, que exige a cada soberanía nacional concesiones en materia económica a cambio de bienestar material; no obedece lamentablemente a intereses democráticos sino a alineaciones estratégicas de oligarquías economicas a lo largo y ancho del planeta.
Este escenario de continuas concesiones democráticas a los intereses de las élites plutocráticas mundiales, es el estado de cosas desde el que La Regeneración se ve forzada a partir políticamente.
LA JUVENTUD ANTE EL SISTEMA DE MERCADO PLUTOCRÁTICO
Una juventud que niega el sistema de mercado plutocrático será fagocitada por el sistema de mercado plutocrático. Una juventud que no se posicione ante el sistema de mercado plutocrático será aplastada por el sistema de mercado plutocrático. El sistema de mercado plutocrático, no es el enemigo, es algo mayor aún, es el estado de cosas. Sólo el que entre en el estado de cosas podrá cambiar el estado de cosas, todo aquel que se evada del estado de cosas, que niegue y que huya del estado de cosas, será aplastado por el estado de cosas.
La mercantilización creciente de la política mundial es, sin duda alguna, el signo más peligroso, y representa la amenaza más devastadora a la que se enfrentará la regeneración politica en este pais en caso de alcanzar un éxito significativo en los próximos comicios.
Todo sistema democrático, incluso cuando lucha por ser un sistema democrático lo más real, directo e independiente posible, si quiere formar parte de las regiones del mundo material desarrollado, debe renunciar a cierta porción de su soberanía en materia de política económica, por exigencia de ese continuo e imparable proceso de integración de mercados de la economía mundial, conocido con el nombre de globalización o mundialización.
Esta llamada exigencia del mercado, que exige a cada soberanía nacional concesiones en materia económica a cambio de bienestar material; no obedece lamentablemente a intereses democráticos sino a alineaciones estratégicas de oligarquías economicas a lo largo y ancho del planeta.
Este escenario de continuas concesiones democráticas a los intereses de las élites plutocráticas mundiales, es el estado de cosas desde el que La Regeneración se ve forzada a partir políticamente.
LA JUVENTUD ANTE EL SISTEMA DE MERCADO PLUTOCRÁTICO
Una juventud que niega el sistema de mercado plutocrático será fagocitada por el sistema de mercado plutocrático. Una juventud que no se posicione ante el sistema de mercado plutocrático será aplastada por el sistema de mercado plutocrático. El sistema de mercado plutocrático, no es el enemigo, es algo mayor aún, es el estado de cosas. Sólo el que entre en el estado de cosas podrá cambiar el estado de cosas, todo aquel que se evada del estado de cosas, que niegue y que huya del estado de cosas, será aplastado por el estado de cosas.
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